Mariposa negra

Hlesia nigricans moth, female. Photo: Gabriela F. Ruellan.
La hembra de la especie es la «mariposa negra» propiamente dicha
Hylesia nigricans caterpillar. Photo: Lucas Rubio.
La oruga vista en detalle. Foto por Lucas Rubio.

Un clásico de la región, Hylesia nigricans suele verse en verano, aunque algunos años le son más favorables que otros. Vive incluso en las ciudades, gracias a que sus orugas pueden alimentarse de las hojas de los árboles urbanos.

Aggregation of Hylesia nigricans caterpillars. Photo: Gabriela F. Ruellan.
Orugas comiendo fresno americano en La Plata

Esta especie tiene varias primas parecidas y se distribuyen al menos hasta México, de manera que si se busca «Hylesia» en la web se verán preciosas fotos de urticarias y dermatitis de toda Latinoamérica. Por lo menos nos rascamos acompañados.

Las orugas de Hylesia nigricans son probablemente las «gatas peludas» proverbiales, esas a las que se les tiene miedito. De chiquitas se mantienen agrupadas (son gregarias) y después de un tiempo se desbandan. Por eso se les dice también «patoteras». Son muy urticantes, pero con no tocarlas es suficiente prevención. La que da más problemas es su mamá.

Efectivamente, los pelos que tiene la mariposa hembra en la punta del abdomen también son urticantes. Pero no es para molestar; es para proteger a las oruguitas. Cuando la mariposa pone huevos, estos quedan cubiertos de esos pelos urticantes, de manera que no se pueden tocar. El problema es que estas mariposas, que son nocturnas, son atraídas por los focos de luz que se encienden a la noche, y mientras revolotean alrededor de ellos se les desprenden pelos que van a parar sobre la gente. Por eso, algunos veranos ocurre que barrios enteros se aparecen en el puesto sanitario más cercano quejándose de ronchas y picazones.

Para que las mariposas negras y la gente no se junten tanto, cuando se sabe que hay orugas cerca se las suele rociar con un preparado que contiene Bacillus thuringiensis, una bacteria que las intoxica. En algunos lugares han cambiado las lamparitas de luz blanca del alumbrado público por lamparitas amarillas, que dicen que atraen menos a las mariposas.

El tratamiento de la dermatitis por mariposa negra se hace con desinflamantes, antihistamínicos, paños fríos o lo que el personal sanitario crea conveniente según el paciente.

Lepidopterismo y prevención

Accidentes por lepidópteros con especial referencia a Lonomia sp.

Por Adolfo R. de Roodt, Oscar D. Salomón y Tomás A. Orduna.
En: Revista Medicina, Vol. 60, Nº 6 (Buenos Aires, 2000).

Lepidopterismo por Hylesia nigricans (mariposa negra). Investigación y acción preventiva en Buenos Aires

Por Oscar D. Salomón, Daniel Simón, Juan Carlos Rimoldi, Miguel Villaruel, Omar Pérez, Raúl Pérez y Héctor Marchán.
En: Revista Medicina, Vol. 65, Nº 3 (Buenos Aires, 2005).

Más fotos y descripción

Biologia de Hylesia nigricans (Berg) (Lepidoptera, Saturniidae, Hemileucinae)

Por Alexandre Specht, Aline C. Formentini y Elio Corseuil.
En: Revista Brasileira de Zoologia, Vol. 23, Nº 1 (Curitiba, 2001).
En portugués.

Nombre científico | Hylesia nigricans

Nombre común de la mariposa | mariposa negra

Nombre común de la oruga | gata peluda, bicho quemador, gusano quemador, bicho quemador chico, patotera

Familia | Saturniidae, subfamilia Hemileucinae

Elemento defensivo | pelos y espinas urticantes

Efecto (de los pelos abdominales de la mariposa hembra) | dermatitis de contacto con mucha picazón, enrojecimiento de la piel, ronchas, tal vez fiebre; la inhalación de pelos produce problemas respiratorios

Riesgo | nulo, salvo en adultos y niños con reacciones alérgicas exageradas

Planta nutricia | hojas de muchos árboles, ya sean exóticos o nativos (fresno americano, arce negundo, frutales, eucaliptos, yerba mate, sauces, tilos, aromos, ligustro…)

Diapausa invernal | como huevo

Tipo de desove | huevos puestos en grupos de a 100, más o menos

Longitud máxima de las orugas | 4 cm

Pupación | pupas dentro de cocones de seda rodeados de hojas

Longitud de los adultos | hembras 3,5 cm, aprox.

Envergadura alar | hembras 4,5 cm; machos 3 cm

Observación | orugas gregarias, urticantes; machos adultos de color marrón (¿inofensivos?)