—¿Por qué criar mariposas?
—Cada cual tendrá su motivo, pero yo recomiendo criar mariposas:
- Con fines de educación ambiental: criar unos pocos ejemplares para que los niños, no tan niños o estudiantes comprendan cómo funciona la naturaleza. Acá puse algunas reflexiones al respecto.
- Y el gran motivo detrás de todo esto: si la gente quiere mariposas, hay que restaurar los ambientes naturales o, al menos, hacer que las plantas y árboles nativos ingresen en los centros urbanos que los desplazaron de su lugar original. Toda la naturaleza gana con esto, y la gente también.
—¿Es cierto que las mariposas viven nada más que un día?
—No. No sé quién empezó a difundir esa historia (habrá sido el mismo aguafiestas que inventó al payaso triste). Alguna especie muy efímera hay, pero las mariposas diurnas que vemos comúnmente en los jardines viven semanas o meses. Sin contar el período que pasaron como huevo, oruga o pupa, claro.
—¿Dónde conseguís los huevitos/orugas/pupas?
—Los encuentro yo —generalmente dentro mismo de la ciudad— o los encuentra algún conocido y me los alcanza.
—¿Vendés huevitos/orugas/pupas?
—No. No tengo ni crío suficientes como para vender y, además, no los vendería. Ellos son libres y no tienen precio y bla, bla, bla… [inserte discurso hippie aquí].
—¿Cómo puedo conseguir huevitos/orugas/pupas?
—A los huevos y a las pupas se los encuentra sabiendo dónde mirar (leé el sitio para averiguarlo), y las orugas pueden aparecer en un jardín o incluso bajar de los árboles y cruzar la vereda. (¡No me digas que nunca viste orugas grandes pisadas en la vereda!). El mejor momento para buscarlos es en primavera y verano.
Una buena estrategia es cultivar las plantas que comen las orugas, de manera que las mariposas nos dejen huevitos ahí. Esta estrategia se puede reforzar viendo en qué otros jardines, parques o campos crecen esas mismas plantas y yendo a visitarlas de vez en cuando. Otra posibilidad es avisarle a nuestros conocidos que nos alcancen las orugas que encuentren por ahí.
—¿Qué hacés con las mariposas una vez que eclosionan?
—Las suelto. Mi interés es sacar fotos de su ciclo de vida, y aprender algo. Además, algunas de las especies que crío son escasas acá en la ciudad, y no está de más que salgan y se reproduzcan un poco.
—¿No se escapan?
—(Esta pregunta es porque yo generalmente tengo los tarros de orugas destapados, y a veces las mariposas posadas en una ramita). No, casi no se escapan. Las orugas no se alejan de su comida. Las mariposas se activan o se duermen de acuerdo con la luz ambiental, así que es posible tenerlas un tiempo corto en casa sin encerrarlas y sin que revoloteen. Más tiempo no es necesario, porque las suelto.
—¿Se puede saber si una oruga es macho o hembra?
—Sí, pero solamente haciendo una disección de la oruga y mirando si adentro tiene órganos masculinos o femeninos… así que personalmente prefiero quedarme con la duda. A simple vista no es posible averiguarlo. En el caso de las pupas y de las mariposas sí se puede ver a simple vista de qué sexo son.
—¿Cuál es la región rioplatense?
—Es la zona de influencia del Río de la Plata, en Sudamérica.
Por razones prácticas, para este sitio web la región rioplatense abarca Uruguay, el norte de la provincia argentina de Buenos Aires y la parte sur de las provincias de Santa Fe y Entre Ríos. Elegí tentativamente este área porque quería definir una zona donde fueran útiles las experiencias de cría que puedo hacer con las especies de mariposas que encuentro en La Plata, donde vivo.
—¿Cuáles son las «gatas peludas»?
—Ninguna oruga en particular lo es, porque «gata peluda» no es una terminología específica. Es decir, generalmente a las orugas con mucho pelo se les dice así, y a veces a las orugas peludas urticantes, que causan ardor al contacto. Pero hay muchas especies de orugas peludas, de las que algunas son urticantes y otras no.
La etimología sí que está entretenida:
La versión más vieja de este nombre puede que sea la expresión en latín tardío catta pilosa (literalmente ‘gata peluda’), que con el tiempo se transformó en el francés antiguo chatepelose, en nuestro «gata peluda» y en el inglés caterpillar.
Menos usado para las orugas es el término «isoca», que viene del guaraní isóg, ‘gusano’, aunque se aplica a las orugas y también a las larvas de escarabajo. A las orugas también se les dice a veces lagarta, que debe ser un préstamo del idioma portugués.
—Las «gatas peludas» son urticantes, ¿no?
—No siempre. Algunas orugas peludas o pinchudas meten miedo pero no hacen nada.
—¿Están vivas las mariposas de las fotos?
—Sí, todas.
—¿Qué cámara usás?
—Tengo una Nikon Coolpix 4500 del año e’ la inundación, que es la que sacó la mayoría de las fotos que se ven en este sitio. Algunas de las fotos fueron tomadas con una Nikon Coolpix 950, que es todavía más prehistórica.
—¿Este es un sitio web comercial?
—No. Es un sitio particular sin fines de lucro. Pasa que mi intención era alojarlo en un dominio .org, pero para sacar un dominio .org hace falta constituirse en una organización sin fines de lucro.